Esta solicitud hecha por Jhon Rojas Cabrera, Gobernador de Nariño busca que paren las acciones violentas para que a lo largo y ancho del departamento se pueda cumplir con el plan nacional de vacunación.
Según el mandatario, la vacuna es un derecho por lo que permitir que la misión medica llegue a los municipios donde hay una marcada presencia de las disidencias de las Farc hace imprescindible el cese al fuego.
Asimismo, el mandatario seccional señalo que al parecer existe temor entre la población y que por el momento hay un retraso en el cronograma de vacunación en los municipios de la costa del Pacífico nariñense, agregando que este retraso se debe a la presencia de los grupos armados que se encuentran distribuidos en zona rural de Tumaco y otras poblaciones del Pacífico y la cordillera central.
Sin embargo, dijo que, aunque no hay una amenaza directa contra el programa de vacunación, aseguró que la sociedad civil exige un cese unilateral de toda hostilidad, además, del temor de los médicos y enfermeras para llegar a etas zonas.