Frente a la difícil situación que enfrenta el país por cuenta de la emergencia social y sanitaria y las recientes medidas que han sido decretadas por la Alcaldía, los comerciantes del corazón mayorista más importante del país GranSan en San Victorino en donde se genera alrededor de más de cien mil empleos directos, se ven en la obligación de cerrar nuevamente lo que significaría una nueva caída de los ingresos y posible cierre definitivo de locales comerciales.
En ese sentido, Yansen Estupiñán, vocero del corazón mayorista más grande del país y gerente del Centro Comercial GranSan en San Victorino hizo un llamado al Distrito, para que les ayuden con los $100 millones de pesos que el comercio debe pagar en servicios públicos, teniendo en cuenta que con la nueva cuarentena se perjudica al sector. Además, que la Alcaldía no ha considerado programas dirigidos a los comerciantes para evitar la quiebra en la que se encuentran los comerciantes.
“Reconocemos todo lo que marca la problemática del COVID-19, pero ya es hora que el Gobierno Distrital se meta la mano al bolsillo” Agregando que “Tienen diferentes programas, pero no para los comerciantes. Igualmente, deben ser conscientes de que el comercio está quebrado y deben meterse la mano al bolsillo” dijo Yansen Estupiñán, vocero y gerente del Centro Comercial GranSan en San Victorino.
Asimismo, señaló que el comercio del centro de la Capital de la República ha buscado la reactivación económica segura y hacer patria en el país bajo el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad que la Alcaldía exige al comercio. Reiterando, la urgencia de que este esfuerzo se vea reflejado en ayudas por parte del Distrito.