Comunidades Indígenas convocan a marchas, piden cese la violencia en sus territorios

Comunidades Indígenas convocan a marchas, piden cese la violencia en sus territorios

La marcha fue convocada para el próximo 15 de noviembre, en esta exigen que cese la violencia que los afecta y piden que sea declarada la paz total.

Los Indígenas del suroeste de Colombia piden ser tenidos en cuenta y que sus solicitudes con respecto a la violencia del país sean escuchados.

El llamado lo hizo el Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric) por medio de su consejero mayor, Ancízar Majín, que aseguró a un medio internacional la importancia de estas marchas  «en rechazo a los 110 asesinatos de indígenas que han ocurrido este año» en el país. «Estamos cansados de tantos asesinatos que nos afectan y también vemos que los ataques a nuestros representantes y amenazas contra nuestros dirigentes se han acentuado en los dos últimos meses», aseguró.

Atentados presentados: Por su parte Ancízar Majín denunció los últimos atentados presentados contra líderes indígenas. 

  1. La senadora indígena Aida Quilcué fue víctima de un atentado.
  2. Hace dos semanas desapareció en Popayán la enfermera Diva Díaz. «De ella no sabemos nada», aseguró Majín.
  3. Reclutamiento forzado de jóvenes indígenas a manos de los grupos armados.
  4. Apoyo a la paz total que ha propuesto el presidente Petro que, según Majín, permitirá «avanzar en la implementación de la paz».

Comunidad Embera Chamí transmite sus conocimientos milenarios con educación propia

Comunidad Embera Chamí transmite sus conocimientos milenarios con educación propia

La etnoeducación es una apuesta muy importante para promover la diversidad e inclusión de las comunidades indígenas en el país. 

Frente a este tema, los indígenas de la Comunidad embera chamí dachijoma del departamento de Caldas, le apuestan a conservar sus tradiciones por medio de su propio modelo educativo que transmita sus conocimientos ancestrales a los más jóvenes. Este modelo pedagógico alternativo se combina con la educación formal logrando la inclusión de estos saberes y conocimientos.

Desde el aprendizaje de los cantos al cuidado de la tierra y los animales,  las fases de la luna para la siembra, preparación de comidas típicas, manufactura de canastos, esteras y elaboración de artesanías o collares de protección son algunas de las acciones que se enseñan en la comunidad. Otros aspectos muy importantes que son trasmitidos a los más jóvenes tienen que ver con la medicina ancestral, las plantas sagradas las prácticas agropecuarias, la danza, música, lengua y rituales.

Todo esto hace parte de la apuesta pedagógica que busca incluir la enseñanza de los saberes ancestrales y con ello, promover modelos pedagógicos alternativos.

En diálogo con el medio internacional DW, Adriana Walker, lingüista integrante del pueblo indígena Embera Chamí aseguró que «La educación propia nace de la lucha de los pueblos indígenas de Colombia por el derecho a una educación en donde se respeten los usos y costumbres de los pueblos, de carácter integrador y no impositivo, que permita romper el patrón de exclusión y discriminación». Con todo esto se promueve una educación intercultural «Es una apuesta pedagógica que armoniza los saberes ancestrales propios, con los saberes impulsados por la educación hegemónica nacional” «Entendemos que existen diferentes formas de pensamiento que pueden coexistir sin imponerse unas a otras”.

Este tipo de educación busca articular ambos mundos de manera armónica, «para que los niños y niñas puedan comprender otros entornos y desarrollar capacidades para la vida”, menciona el «Mayor» Carlos Eduardo Gómez Restrepo, consejero de organización, gobierno propio y asuntos políticos del Consejo Regional Indígena de Caldas, CRIDEC al medio internacional DW.

Comunidades Indígenas convocan a marchas, piden cese la violencia en sus territorios

Se estima que cada cuatro días se asesina un indígena en Colombia

Según el reporte del Observatorio de Derechos Territoriales de la Comisión Nacional de Territorios Indígenas (CNTI) en el informe que publicaron “El eterno retorno de la violencia política contra los Pueblos Indígenas” indican que en el último año se han presentado alrededor de 114 homicidios de personas indígenas, de los cuales 17 se dieron en el marco de siete masacres.

Estas cifras provienen de un análisis realizado por el Sistema de Violencia Sociopolítica de los Pueblos Indígenas (SIVOSPI).

Según este informe la violencia contra los pueblos indígenas se ha incrementado de manera exponencial tras la firma del Acuerdo Final de Paz, en 2016. En 49 páginas destacan los diferentes ataques que han recibido los diferentes liderazgos indígenas. El 68% de los asesinados fueron líderes comuneros y las víctimas ejercen un rol importante de liderazgo social, político, ambiental o comunitario en oficios como médicos tradicionales, autoridades o guardias.

Otro dato importante que destaca el informe es la edad de los rangos de los homicidios, pues destaca que se han presentado entre los 18 a 32 años, revelando que es un ataque claro contra las nuevas generaciones de liderazgos políticos que han venido surgiendo dentro de las comunidades.

“Para los pueblos indígenas una preocupación enorme es que varios de los asesinatos tienen que ver con lideres y lideresas que han venido exigiendo y protegiendo el territorio. Es deber y obligación del Estado brindar garantías para su protección. Llegar con inversión y materializar el derecho a la formalización de los territorios en donde estamos los pueblos indígenas”, aseguró a EL PAÍS Camilo Niño, líder arahuaco y secretario técnico de la CNTI.

Otro dato que destaca el informe es es que los homicidios se han concentrado en el sur occidente del país y se ha concentrado en mayor medida contra las comunidades Nasa y Awá. Ambos pueblos fueron las mayores víctimas de los homicidios de población indígena en 2021, con un 45% y 19% respectivamente. En el caso del pueblo Awá, las denuncias de un genocidio en su contra se han extendido por más de una década. Cuatro de cada cinco asesinatos se dieron en cuatro departamentos: Cauca (42,9%), Nariño (25%), Chocó (8,7%) y Putumayo (5,2%).

Se desbordó el río Dubaza en el municipio de alto Baudó en Chocó

Se desbordó el río Dubaza en el municipio de alto Baudó en Chocó

El Gobierno Ancestral Territorial de los Pueblos Indígenas de Chocó realizó la denuncia pública en la que manifiesta sea declarado el estado de emergencia por la crisis climática en sus territorios.

Esta emergencia se presenta en el resguardo indígena de los ríos Catru, Dubaza y Ankoso, que posee una población de 12 mil habitantes, de la etnia embera dobida integrada por 14 asociaciones y cabildos mayores. Este ha sido uno de los corregimiento mas golpeados por las múltiples amenazas y desplazamientos de los habitantes, líderes de las comunidades que hoy no han podido regresar a su comunidad de origen, de igual forma, han tenido afectaciones por cuenta de la fuerte ola invernal que ha generado inundaciones y con ello perdida de alimentos, crías, cultivos, destrucciones de las viviendas, los medios de transportes y demás enseres de utilidad personal.

En el año 2021 esta comunidad se vio afectada por la fuerte ola invernal que dejó como resultado el desbordamiento de los ríos Dubaza, Catrú y Ankosó, esto ocasionó importantes pérdidas materiales y dejó como resultado afectaciones permanentes en sus habitantes, que hasta el día de hoy no han sido atendidas oportunamente por autoridades municipales, departamentales y nacionales. 

De nuevo la comunidad se ve afectada por la creciente que dejó como resultado grandes pérdidas materiales. Frente a este tema el GOBIERNO ANCESTRAL TERRITORIAL DE LOS PUEBLOS INDIGENAS DEL CHOCÓ presenta una serie de peticiones como lo son: Ser declarado el estado de emergencia en la zona, la activación del comité de atención de desastres Departamental y Municipal que pueda atender a la población afectada, realizar una coordinación con la organización regional en la entrega de las ayudas de carácter urgente, también esperan se genere un espacio de dialogo con las organizaciones regionales para lograr coordinar acciones de mitigación con proyectos comunitarios desde el enfoque diferencial, para restablecer los derechos de los afectados.