El pasado Domingo finalizó la Conferencia de las Naciones Unidas para el Cambio Climático – COP27, celebrada en Sharm el Sheij, Egipto durante dos semanas; este evento estratégico para las decisiones medioambientales recibió la visita de gobiernos, empresas privadas y líderes sociales del mundo para avanzar hacia la conservación sostenible de los bosques, la reducción de la deforestación en el planeta.
Colombia también estuvo presente con la intervención del Presidente de la Republica, Gustavo Petro, pero también con la participación de la Organización Nacional Indígena de Colombia ONIC en epresentación de los Pueblos Indígenas del país.
La participación en la COP27 del Consejero Mayor de la ONIC, Orlando Rayo Acosta, y de los demás líderes del Movimiento Indígena en Colombia, marca un hito en la lucha por la defensa de la Madre Tierra, por primera vez tiene participación una delegación indígena en un escenario mundial de medio ambiente tan importante, este hecho sitúa al Gobierno Indígena de Colombia como un actor clave en la toma de decisiones en materia ambiental y minero energética del país, abriendo la discusión internacional sobre el tema ambiental, que debe leerse por los Pueblos Indígenas desde el ejercicio de Gobierno Propio y haciendo un llamado a la superación de los desafíos que enfrentamos los pueblos indígenas para acceder al financiamiento climático directo. De igual forma, posiciona a la ONIC en la lucha contra la deforestación; en su apuesta nacional por una transición energética con justicia social y climática; y prioriza la urgencia de protección que requiere los Territorios Indígenas.
La protección de la Amazonía ha sido una lucha abanderada por el Movimiento Indígena, siendo la apuesta estructural de la agenda ambiental, la Organización Nacional Indígena de Colombia ONIC ha venido posicionando las medidas de protección para todos los ecosistemas del territorio colombiano, reconociendo a las autoridades propias como interlocutores para articular las propuestas, programas y proyectos de “Colombia, Potencia Mundial de la Vida”.