fbpx

El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ha confirmado que el Gobierno Nacional procederá con el incremento del precio del diésel en Colombia, a pesar de no haber alcanzado un acuerdo con los transportadores de carga. Esta medida, que Bonilla calificó como «impopular pero necesaria», busca alinear los precios del diésel con los estándares internacionales, un ajuste que se implementará de manera unilateral tras la falta de consenso en las negociaciones.

El plan contempla un incremento total de $6.000 por galón, distribuidos en dos etapas: $3.000 adicionales antes de que finalice 2024 y otros $3.000 en 2025. Con este ajuste, se espera que el precio del diésel alcance los $15.000 por galón el próximo año. Sin embargo, aún no se han detallado los mecanismos específicos ni los plazos exactos para la implementación de estos aumentos.

Lea: Congreso debate eliminación gradual del 4 X 1000 para reducir costos financieros

La decisión del gobierno ha generado preocupación entre los transportadores de carga, quienes previamente expresaron su incapacidad para asumir el aumento sin garantías de una reactivación económica suficiente. Alfonso Medrano, presidente de la Cámara Intergremial de Transporte Unidos, señaló que los transportadores no cuentan con las condiciones económicas necesarias para enfrentar esta alza en los costos del combustible.

Este anuncio se produce en un contexto de tensiones entre el gobierno y los sectores que dependen del diésel, quienes temen que este incremento repercuta negativamente en sus operaciones y en la economía en general. A pesar de las críticas, el gobierno sostiene que la medida es indispensable para corregir lo que describe como una «inflación imaginaria» en el mercado del diésel y para asegurar la sostenibilidad financiera del país.

 

Comparte en tus redes