por Konuco | Oct 3, 2024 | Destacadas, Nacional
La Costa Caribe de Colombia enfrenta una grave crisis de alumbrado público, con un apagón inminente que podría dejar a los departamentos de Guajira, Magdalena y Atlántico en la oscuridad.
La Asociación Nacional de Alumbrado Público y Ciudades Inteligentes (ANAP) ha alertado sobre las consecuencias devastadoras de la decisión reciente de la interventoría de la Empresa AIRE de suspender el cobro por estos servicios vitales.
Una Decisión Cuestionable
Armando Gutiérrez, Director Ejecutivo de ANAP, ha criticado fuertemente la decisión del Agente Interventor, Ingeniero Carlos Diago, calificándola de «arbitraria e ilegal».
Esta medida se ha tomado sin realizar un análisis exhaustivo y contradice la Ley 1819 de 2016, que establece que el recaudo del impuesto de alumbrado público debe realizarse a través de las facturas de servicios públicos domiciliarios.
«La falta de acción del Gobierno para mitigar esta situación es alarmante. Los municipios se quedarán sin recursos para pagar la energía del alumbrado, lo que generará un colapso en los servicios», advirtió Gutiérrez.
Consecuencias para la Comunidad
La decisión de no cobrar por el alumbrado público no solo implica la posibilidad de un apagón, sino que también detendría las iniciativas de modernización, como la transición de luminarias de sodio a LED, que buscan reducir el consumo energético.
Esto afectará directamente la seguridad de los ciudadanos en una región donde la violencia y la delincuencia son preocupaciones constantes.
Gutiérrez hizo un llamado urgente al Agente Interventor para que reconsidere su postura. «Si no se actúa rápidamente, se romperá la continuidad del servicio y se abrirán caminos para acciones legales contra las entidades territoriales», agregó.
Lo que se puede venir
La inminente crisis de alumbrado público en la Costa Caribe subraya la necesidad de una gestión responsable y conforme a la ley de los servicios públicos.
La decisión del Agente Interventor no solo pone en riesgo la seguridad de millones de ciudadanos, sino que también puede acarrear serias consecuencias legales y financieras para las autoridades locales.
Es imperativo que se tomen medidas proactivas para evitar que esta situación se agrave.
NACIÓN COLOMBIA – Nacional
por Konuco | Oct 3, 2024 | Educación
La Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia (Asobancaria) revisó al alza su previsión de crecimiento para la economía colombiana en 2025. El gremio ahora proyecta que la actividad productiva se expandirá a un ritmo del 3,2%, una cifra superior al 2,8% estimado previamente.
La Asociación resaltó que ese mayor crecimiento está “sustentado en unas condiciones financieras más favorables, la convergencia de la inflación al rango meta y el impulso de 0,5 puntos porcentuales que generará el Pacto por el Crédito, la estrategia tripartita de la Banca, el Gobierno y el sector privado, para aumentar el otorgamiento de crédito en 55 billones de pesos a sectores estratégicos”.
En este contexto, Asobancaria prevé que la administración pública, salud y educación crezcan un 5% el próximo año; actividades financieras un 4,8%; entretenimiento un 4,5%; información y comunicaciones un 3,5%; la construcción un 3,3%; el sector agropecuario un 2,25%; servicios profesionales un 2,4%; la industria y los servicios públicos un 2,1% cada uno; el comercio un 1,7%; y la minería un 0,5%.
También dio a conocer que espera que la cartera bancaria crezca un 3,3% en 2025, superando el pronóstico anterior del 2,5%.
En lo que respecta al sector externo, según Asobancaria, la pérdida de tracción de la economía global, junto con el efecto de una base estadística a cierre de año, llevaría a que el ritmo de crecimiento de las exportaciones alcance 1% en 2024, para luego presentar una contracción de 0,6% en 2025 debido a la ralentización de las mayores economías del mundo.
Entretanto, proyecta “que las importaciones continúen recuperándose conforme lo hacen el consumo de los hogares y la inversión, de manera que se expandirían a ritmos de 2,9% y 6,3% en 2024 y 2025, respectivamente”.
por Konuco | Oct 3, 2024 | Destacadas, Política
El expresidente Álvaro Uribe Vélez decidió retirarse de la audiencia judicial en la que se le acusa de presunto soborno a testigos y fraude procesal, argumentando falta de garantías. A través de su cuenta en X (antes Twitter), Uribe explicó las razones de su decisión en un hilo detallado.
“Sin garantías, ¿Por qué me retiré de la audiencia?”, comenzó el mensaje, indicando que el 30 de septiembre la defensa apenas recibió acceso completo a los dispositivos de Juan Guillermo Monsalve.
¿Uribe tiene razón? ¿A las personas se les debe juzgar por lo que hacen, no por quienes son?
El proceso judicial contra Álvaro Uribe Vélez ha estado plagado de irregularidades que van más allá de su condición de expresidente. En una democracia sólida, el principio básico de un juicio justo debe estar garantizado para todos, sin importar su posición o influencia. Al rechazar las solicitudes de la defensa para analizar pruebas fundamentales, se está violentando un derecho que es esencial para cualquier acusado: el de la presunción de inocencia y la posibilidad de una defensa plena.
Uribe tiene razón al decir que necesita acceso completo a las pruebas para defenderse apropiadamente. Si bien su caso es complejo y rodeado de una alta carga política, esto no justifica que las reglas del juego cambien según quién esté en el banquillo de los acusados. El problema va más allá del personaje: si las garantías procesales no se respetan para él, ¿qué queda para el resto de los ciudadanos?
Este editorial defiende un punto de vista que debería ser una verdad universal: todos tienen derecho a ser juzgados de manera justa, sin importar su pasado, su reputación o los delitos de los que se les acusa. Al negarse a proporcionar el tiempo necesario para que la defensa evalúe las pruebas, se debilita la credibilidad del sistema judicial colombiano y se envía un mensaje peligroso: que la justicia puede moldearse según convenga a los intereses del momento.
Legalmente, Uribe no pide privilegios, sino un trato justo que respete las garantías fundamentales. Es crucial recordar que a las personas se les debe juzgar por lo que hacen, no por quiénes son. En un Estado de derecho, la imparcialidad del sistema judicial es la única forma de salvaguardar la confianza de los ciudadanos.
Según Uribe, la jueza del caso negó la solicitud de la defensa de extender el plazo para analizar más de 800 gigabytes de información contenida en el teléfono y el computador de Monsalve, dispositivos que permanecían bajo custodia de la Corte Suprema desde su decomiso. “No basta con la copia digital hecha por la Fiscalía, se necesitan los dispositivos originales”, afirmó, subrayando que incluso la Fiscalía conoce una incongruencia grave entre la copia entregada a la Corte y los dispositivos reales.
Ante la negativa de la jueza de permitir un tiempo adicional, el abogado defensor Jaime Granados también se retiró. Uribe concluyó en su hilo: “Le rogué a la señora juez que no me dejara sin pruebas. Ante su negativa no me dejó opción que retirarme de la audiencia”. En la audiencia, la jueza insistió en que su presencia no era obligatoria, y su retirada se interpretó como una declaración de inocencia automática
Uribe asegura que esta situación afecta su derecho a una defensa adecuada y a un proceso justo, planteando la preocupación de que su estrategia depende de la evaluación completa de las pruebas. La audiencia continúa sin su presencia, a la espera de que el tribunal determine los próximos pasos.
Como ya lo mencionamos, el sistema judicial debe ser garante de imparcialidad y transparencia, no un escenario donde se modifiquen las reglas según el acusado. Álvaro Uribe, independientemente de su papel en la política, tiene derecho a una defensa completa y acceso a las pruebas necesarias. Si las cortes no garantizan este principio, se corre el riesgo de minar la confianza en la justicia. En Colombia, juzgar a alguien por su reputación y no por la evidencia es un retroceso peligroso que afecta a todos los ciudadanos, sin importar quién esté en el estrado.
por Konuco | Oct 3, 2024 | Destacadas, Nacional
Tal y como lo anticiparon algunos medios, Luis Carlos Vélez ya no forma parte de La FM. Su salida ha sorprendido a muchos oyentes, y en su lugar, de manera temporal, ha asumido el cargo el exsenador Juan Lozano Ramírez. La elección de Lozano ha generado varias opiniones en la esfera política y mediática, especialmente por su fuerte vínculo con el uribismo y su falta de experiencia directa en medios de comunicación.
¿Quién reemplazará a Luis Carlos Vélez en La FM?
Aunque Juan Lozano asumió el rol temporalmente, La FM está buscando un perfil periodístico que pueda liderar el programa de manera permanente. Entre los nombres más sonados están figuras reconocidas del periodismo colombiano.
Uno de los candidatos es Yamid Amat Serna, hijo del periodista Yamid Amat. Sin embargo, Amat Jr. no cuenta con el respaldo de todos los sectores de la prensa, ya que muchos lo consideran una persona arrogante que ha intentado emular el éxito de su padre, sin conseguir el mismo reconocimiento profesional.
Otra candidata destacada es Vicky Dávila, actual directora de Revista Semana. Dávila podría regresar a la radio, un medio en el que ha sobresalido a lo largo de su carrera. Se especula que este nuevo rol podría darle una plataforma estratégica para fortalecer lo que sería su futura campaña presidencial, que muchos ya interpretan como una gira encubierta.
Por último, la periodista internacional Patricia Janiot, actual presentadora de CNN, también ha sido mencionada como una opción de peso. Janiot ha demostrado ser una periodista de gran trayectoria y, según fuentes cercanas, estaría considerando seriamente la oferta de La FM para volver a Colombia y tomar las riendas del programa informativo.
Reacciones en el mundo periodístico
La salida de Luis Carlos Vélez ha desatado diversas reacciones en redes sociales y en la prensa. Desde Nación Paisa y el Sistema Informativo Nación Colombia, lamentamos que Vélez haya optado por bloquear a nuestra redacción en X (antes Twitter). Este tipo de acciones son vistas como un atentado a la libertad de prensa, una causa que defendemos de manera inquebrantable.
Asimismo, destacamos que el expresidente Álvaro Uribe Vélez ha hecho lo mismo, bloqueando nuestras cuentas en redes. Sin embargo, desde nuestra casa editorial seguiremos informando sin temor y mantendremos nuestro compromiso con el periodismo independiente y la libertad de expresión.