Un devastador ataque con misiles llevado a cabo por Rusia en varias localidades de Ucrania resultó en la muerte de al menos 31 personas y 154 heridos el lunes, según reportaron las autoridades. Uno de los misiles impactó un hospital infantil en la capital, Kiev, donde los servicios de emergencia se encuentran en la búsqueda de víctimas entre los escombros.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, informó en redes sociales que el ataque afectó a cinco ciudades, utilizando más de 40 misiles de diferentes tipos, que dañaron edificios residenciales e infraestructura pública. En Krivói Rog, al menos 10 personas perdieron la vida y 47 resultaron heridas en lo que el responsable local describió como un ataque masivo. En Kiev, al menos siete personas fallecieron.
Zelenskyy instó a la comunidad internacional a no permanecer en silencio ante estos hechos, destacando la gravedad de las acciones rusas.
El incidente ocurrió en la víspera de una cumbre de la OTAN en Washington, donde la alianza discutiría el continuo apoyo a Ucrania. En el hospital infantil de Kiev, un edificio de dos pisos quedó parcialmente destruido, mientras que el bloque principal de 10 pisos sufrió daños significativos con ventanas y puertas destrozadas y muros ennegrecidos. El personal médico y los vecinos colaboraban para remover escombros en busca de niños y trabajadores atrapados.
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Debido al ataque, el hospital tuvo que ser evacuado y cerrado. En otras áreas de Kiev, el mayor bombardeo en casi cuatro meses dejó siete muertos y 25 heridos. El ataque incluyó misiles hipersónicos Kinzhal, que son extremadamente difíciles de interceptar debido a su alta velocidad.
Las explosiones sacudieron los edificios de la ciudad, dejando una sección completa de un edificio residencial destruida. Además, tres subestaciones eléctricas en dos distritos de Kiev fueron gravemente dañadas o completamente destruidas, según informó la compañía eléctrica DTEK. Este ataque ocurrió durante una hora del día en la que muchas personas estaban en las calles, lo que aumentó la cantidad de víctimas, según el jefe de la oficina presidencial de Ucrania, Andrii Yermal.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, indicó que las autoridades aún estaban evaluando el alcance total de los daños causados por el ataque. La gravedad del incidente y su coincidencia con la cumbre de la OTAN subraya la necesidad urgente de una respuesta internacional coordinada para abordar la agresión rusa.
Este último ataque es un recordatorio brutal de la violencia continua en Ucrania y de la necesidad de apoyo internacional. Las víctimas y sus familias ahora enfrentan una devastación inconmensurable, mientras el país sigue luchando por su soberanía y seguridad en medio de uno de los conflictos más grandes en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Foto: AP/ Evgeniy Maloletka