Ante el Congreso de la República, se radicó en las últimas horas el proyecto de ley con el que se busca prohibir la práctica de fracking en Colombia, como parte de una de las propuestas del gobierno del presidente Gustavo Petro Urrego.
En otras palabras: cerrarle de manera definitiva la puerta a esta técnica en el país.
«No es lógico que si queremos comenzar una transición energética, vayamos a profundizar la dependencia de combustibles fósiles con técnicas de altísima incertidumbre e impacto social y ambiental», agregó Muhamad.
Con esta iniciativa, el Gobierno Nacional, a través de la cartera ambiental, el Ministerio de Minas, congresistas, organizaciones socioambientales y la Alianza Colombia Libre de Fracking, busca fortalecer la protección del medio ambiente y la salud de las futuras generaciones.
También se propone prevenir los conflictos socioambientales asociados al fracking, y cumplir con los compromisos internacionales plasmados en el Acuerdo de París, ratificado por Colombia.
Así las cosas, de convertirse en ley este proyecto, en Colombia se prohibiría expresamente la exploración y producción de hidrocarburos provenientes de yacimientos no convencionales.
Además de la suscripción, adición u otorgación de contratos, concesiones, licencias y permisos ambientales para dichas explotaciones y el fracking. Adicionalmente, también se reformularía la política de transición energética.
¿Qué es el fracking?
El Fracturamiento Hidráulico Multietapa, como se le conoce al fracking, es la técnica con la que se efectúa la inyección, en más de tres etapas, de un fluido compuesto por agua, propante y aditivos químicos.
Todo con el objetivo de generar o inducir fracturas en las rocas de los yacimientos no convencionales para facilitar el flujo de la formación productora.
«Estamos avanzando en blindar a los territorios de lo que sería la expansión de la frontera extractiva de hidrocarburos», explicó Andrés Gómez, de la Alianza Colombia Libre de Fracking.
«Estamos entonces prohibiendo la explotación de yacimientos, de roca generadora, que son, básicamente, los que hemos conocido que están en Puerto Wilches, con los pilotos», destacó Gómez.
Objetivo
Asimismo, la ministra Muhamad indicó que la presentación de este proyecto de ley tiene varios argumentos, entre ellos, el compromiso de trabajar por un país que haga una transición social, económica y ambiental para enfrentar la crisis climática.
«Y nuestra creencia en la democracia ambiental, que significa la necesidad de tomar la voz de las comunidades y lograr concertaciones en las políticas de desarrollo, y nuestra coherencia ambiental con los compromisos de Colombia», manifestó.
«Este proyecto de ley, que será debatido próximamente en la Comisión Quinta del Senado, no afectará la explotación de los yacimientos convencionales que hoy se encuentran operando en el país.