En un llamado a la atención del alcalde de Cartagena, ciudadanos preocupados se han congregado en frente de la icónica Torre del Reloj en el corazón de la ciudad para expresar su indignación ante la persistente problemática de la prostitución infantil. La ciudad, famosa por su belleza turística, se ve empañada por la presencia de casos alarmantes de explotación infantil en este sector.
La protesta busca que las autoridades tomen medidas concretas para abordar el creciente problema que afecta a la comunidad más vulnerable. Los manifestantes están hartos de que estos casos continúen en su ciudad y exigen una respuesta inmediata y efectiva por parte del gobierno local.
Uno de los puntos que ha generado mayor preocupación es un establecimiento de apariencia llamativa, ubicado a las afueras del Centro Histórico de Cartagena, en el barrio El Bosque. Se ha revelado que este establecimiento de tres pisos, con una fachada en cerámica y un letrero provocativo iluminado con luces LED en forma de piernas femeninas, es utilizado para la explotación de mujeres en condiciones deplorables.
Este lugar, que se presenta como un prostíbulo, también alberga calabozos donde mujeres son sometidas a situaciones de tortura y abuso. Las condiciones en las que se encuentran estas mujeres han generado consternación entre los manifestantes y la sociedad en general.
La entrada al establecimiento está resguardada por hombres robustos que controlan el acceso, permitiendo la entrada a extranjeros que gastan grandes sumas de dinero, mientras las mujeres que están atrapadas en este ciclo de explotación no han pactado voluntariamente ninguna deuda. Cámaras ocultas fueron utilizadas para registrar el interior del lugar, mostrando un ambiente de desesperación en el que las mujeres son forzadas a buscar clientes, bailando y pavoneándose con poca ropa.
Los manifestantes han expresado su solidaridad con las víctimas y han solicitado que se investigue a fondo esta situación y se tomen acciones legales contra los responsables. La protesta en frente de la Torre del Reloj busca recordar a las autoridades la urgencia de abordar la prostitución infantil y brindar apoyo a las mujeres afectadas por esta explotación.
La sociedad cartagenera, en conjunto, espera que esta manifestación de preocupación impulse cambios significativos en la manera en que se enfrenta este problema, permitiendo que la ciudad recupere su imagen y belleza turística sin dejar de lado la protección de sus ciudadanos más jóvenes y vulnerables.
