El accidente registrado en la tarde del martes en la pista del aeropuerto José María Córdova de Rionegro (Antioquia), que sirve a Medellín, cuando se explotó una llanta de un avión de la aerolínea LATAM, generó una grave contingencia no solo en esta terminal aérea, sino en El Dorado de Bogotá.

Se calcula que la reacción en cadena que produjo el cierre de este aeropuerto, ante la alarma que causó este suceso y la necesidad de remover la aeronave, afectó a más de 22.000 pasajeros no solo de Medellín sino del país y el mundo.

La Alianza de Medios Independientes hizo presencia en El Dorado para seguir de cerca lo que acontecía en este aeropuerto debido a la emergencia. Pero cuando intentó ingresar a las instalaciones del principal centro aéreo del país se le impidió el ingreso por personal de vigilancia.

Este sería un claro caso de censura al ejercicio periodístico por parte de la Aeronáutica Civil, que obstaculizó la labor de los reporteros que intentaban registrar, de primera mano, lo acontecido en esta terminal, en especial con los pasajeros provenientes de la capital antioqueña.

El director de la Aeronáutica, Jair Orlando Fajardo, solo se remitió a dar un reporte de lo acontecido en Rionegro y las contingencias en los demás aeropuertos del territorio nacional a través de un video, teledirigido, sin  siquiera darle la posibilidad a los medios de contrastar su versión.

Esto sería una más en la lista de arbitrariedades por parte del órgano rector de la aviación en el país, en una situación de emergencia que tiene en vilo a cientos de familias en Colombia, quienes esperan poder solucionar este inconveniente en su cotidianidad, en un hecho que causó alarma.

En cuanto a la emergencia, se espera que en el transcurso de este miércoles, en horas de la tarde, se empiecen a descongestionar los aeropuertos de Rionegro y Bogotá, con la reprogramación de los vuelos que tuvieron que ser postergados luego del cierre del José María Córdova.

 

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